Quinto Elemento estrena Retroalimentación

Quinto Elemento estrena RetroalimentaciónQuinto Elemento acaba de estrenar su disco Retroalimentación; un disco en formato EP con el que 
se han presentado de manera certera. 

Retroalimentación es el esperado disco de Quinto Elemento; un disco en formato EP en el que hay muchas curiosidades, guiños y un gesto de calidad.


Quinto elemento es una formación muy interesante de la que ya os hemos dado cuenta y que ahora lanza cinco temas gestados en el estudio Neo Music Box de Aranda de Duero a las ordenes en la producción de José Caballero. La idea estaba clara y la juventud es un grado (en este caso más que positivo). El EP tiene una ventaja clara, es breve y entra solo, la parte más peleaguda es saber que las canciones que deben entrar deben ser reflejos de la propuesta y la banda lo ha tenido claro. Tengo es el primero de los temas; un tema donde la parte instrumental tiene varios aspectos interesantes, la pegada de la batería está muy presente marcando ritmo con un bajo que se postula como un seguro al respecto, se cuelan guiños a las teclas y arreglos y las guitarras van a apareciendo para tener momentos interesantes como esos pequeños solos o momentos donde tienen más protagonismo mientras que la voz está siempre en primer plano y eso que es un tema breve, un single nato con todo lo necesario y muchos leads con los que quedarnos en la primera escucha como una parte de voces donde se marca la parte doblada de la voz. Con un primer tema que es un single de manual con técnica, nos encontramos con Quiero ver salir el sol; una canción que empieza mucho más tranquila, casi en un formato acústico jugando con el medio tempo si no fuese por la cola de la parte vocal y como la batería marca la pegada con una caja que está bien posicionada en la mezcla y en el tempo y unas guitarras que se quedan atrás en la mezcla, en ese sitio donde tocan la fibra sensible, una fibra que se suma a la letra y frases como las cercanas al estribillo donde la canción se crece (detalle del arreglo de batería cambiando la pegada y utilizando el tempo a su favor. Aparecen momentos donde el silencio (entendido como ausencia de acordes y dejando que los instrumentos mueran para casi llegar a la ausencia de sonido) marcan ese momento previo a la subida. No está bien decirlo pero esta canción debería estar en esas listas que se dedican a la pareja y seguramente sea un hit que podríamos tildar como canción de emociones adolescentes y es que ese momento de la guitarra con un solo que hace de lead junto a la subida del tono y las voces que pasan de ser voces cantadas a casi guitadas (pero afinadas) siendo ese empuje hacen de la misma esa emoción que en la primera escucha ponen los pelos de punta.

Quedan tres canciones y el rock and rollo y pop más intenso están presenten en Quinto Elemento de manera clara. Tensiones y tinieblas es una propuesta de segunda escucha, quizá sea por el cambio de ritmo que se introduce y como juegan con la celeridad de la parte rítmica y el corte de la canción en dos tempos, aparición de un teclado inesperado antes de un solo muy interesante y como juega la canción en el ataque, como dirían muchos, la canción tira mucho al frente y es algo extraño pero en la segunda escucha ya se ha quedado y la forma de estructurar la letra ayuda. Llega Cristales en tu boca y llega el momento de jugar con los sintes, las capas y dejar que las emociones tomen el control dado que la canción es muy fresca y en esta canción la mezcla da al bajo un papel capital en la canción aportando velocidad y énfasis. Mención aparte a los sintetizadores y pistas, ese lead les ha dado un extra y la letra casi pasa a un segundo plano pero se queda. Cierra este trabajo con gran acierto y es que Hasta el final aporta una especie de resumen en el sentido más estricto de la palabra de por donde puede ir el directo, sobran las palabras, solo se debe disfrutar.


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