Berlín Texas, Entrevista

Berlin Texas
La formación Berlín Texas presenta una serie de canciones entre el sonido americano y el rock. Descubrimos mucho más con esta entrevista.

Berlín Texas está trabajando en poder presentar las canciones que les identifiquen (que ya están grabadas). Ahora es el momento de poder charlar con ellos.

En este caso charlamos con Marta (M.), Mario (m.) y Marcus (Ma.), La banda son, en concreto Mario Barbero (bajista), madrileño, viene del Rock, ha tocado con Los Cucanes. Marcus Wilson (guitarra y coros), brasileño, viene del blues/rock, toca con Abel Calzetta (Cosmosoul), Pifastor, Luback, Jump for Sugar.

-¿Cómo estáis llevando todos como banda estos meses? 

M. Bien, nos comunicamos bastante, no es lo mismo, claro, pero seguimos creando, aunque en mi caso la energía fluctúa bastante, y eso que trato de evitarlo imponiéndome rutinas, pero el ánimo a veces va a su aire.

m. Partiendo de la base de que pienso que tener una banda es casi imposible lo llevamos bastante bien, ahora por las circunstancias trabajando a distancia e intentando hacer canciones nuevas.

Ma. Bueno, un bajón no poder juntarse en el local y ensayar juntos. Pero en la distancia al menos aún podemos maquetar temas nuevos y probar. No es lo mismo que en persona, que la comunicación fluye mucho más fácil pero es lo que toca, hay que adaptarse.

-¿Esperábais este buen feedback de la gente ante este proyecto?

m. Nunca me planteo que feedback tendremos, asique como no hay expectativas con que a alguien le mole es todo un éxito.

Ma. Supongo que tendría que decir que no, más que nada porque no suelo pensar en el feedback exterior. Cuando estuvimos creando y montando “El Momento Crucial” y los temas que tenemos grabados ahora, no pensaba en si le iba a molar a la gente o no, simplemente seguía un poco mi instinto e intentaba hacer algo bueno según mis criterios, de lo que pudiera estar orgulloso. Al menos esa es la filosofía que intento seguir. El buen feedback que dices obviamente se agradece un montón, es genial, pero para mí es lo secundario. Lo queremos, pero no lo perseguimos como objetivo final.

M. Ami me olió bien desde el principio sí, tenía buena intuición con ellos. Por eso le lie la manta a la cabeza. Pero de ahí a pensar en cómo lo iba a recibir la gente, no. Procuro no pensar en eso, en sí va a gustar o no, corres el riesgo de alejarte de lo que quieres hacer.

-¿Cómo será lo que llegue en este trabajo que podáis lanzar? 

M. Yo es el trabajo del que más orgullosa me siento.

m. Un EP en el que creemos y nos gusta, la producción es la hostia.

Ma. Será la hostia. Como dije en la respuesta anterior, al menos en mi opinión, el objetivo primario lo hemos alcanzado: podemos estar orgullosos y nos gusta.

-¿Cómo ha sido el trabajo en el local a la hora de componer las canciones y adaptarlas?
Ma. Normalmente la semilla de los temas parte de Marta. Nos envía previamente ideas un poco desnudas y en el local tratamos de arroparlas, venimos cada uno con su perspectiva y propuestas. Mola, porque en el local en ese intercambio de ideas nos conocemos un poco más a cada uno, vamos compartiendo más referentes y la canción empieza a ser algo de todos y más concreta, con más personalidad.

m. Todas las canciones nacen con Marta que trae la idea a acústica y voz, a partir de ahí vamos desarrollando, prima bastante la democracia tan difícil de ver en las bandas.

M. Bastante sencillo. Yo les mandaba un puñado de canciones desnudas, a guitarra y voz, ellos elegían algunas, y traían las ideas, las probábamos en el local, maquetabamos, escuchábamos luego y así.

-A la hora de hablar sobre el estudio ¿Cómo ha sido toda esa experiencia?
m. Increíble, nunca pensé que se podía grabar tan cómodo. Raúl sacó un sonidazo espectacular y personalmente aprendí muchísimo, todo un acierto.

M.Creo que grabar con Raúl Pérez fue todo un acierto. Nos entendimos a la primera.

Ma. Increíblemente suave. Yo en particular lo paso un poco mal en el estudio, me vuelvo hiper paranoico y me cuesta no tener la cabeza dando mil vueltas a cada detalle, increpando mi proceso de grabación. Sin embargo, en La Mina se respiraba un ambiente super acogedor y era fácil sentirse seguro y grabar más relajado. La verdad que fue todo un acierto, y sorprendentemente el alojarse allí mismo donde grabábamos estuvo muy bien. La única putada el tener que hacerse el viaje a Sevilla desde Madrid, pero valió la pena.

-¿Existe alguna canción que evolucionase más tras entrar al estudio y ante este formato?
m. Había tres que estaban más o menos claras aunque fueron evolucionando en el estudio y una en la que no teníamos claro nada, sorprendentemente es la que más me gustó al final.

M. Si, Falta de Tacto, era la que iba más falta de todo, jaja, sobre todo de fe. Yo siempre creí en esta canción, Raúl también y al final es de las que más nos gusta.

Ma. Entramos a grabar 4 canciones, y recuerdo que teníamos 3 que íbamos más seguros y la cuarta estábamos llenos de dudas. Menos mal que decidimos ver qué pasaba con ese cuarto tema en el estudio, porque con Raúl y con el buen ambiente en el estudio, esa canción pudo evolucionar y tomar una forma que nos encanta.

-¿Cómo definiríais vuestros directos?

M. Me gusta cómo lo define Marcus.

Ma. Crudos y potentes.

-¿Existe opción al acústico?

m. Si existe, es una forma fácil desde el punto de vista logístico de mostrar los temas aunque prefiero el eléctrico ya que es ahí donde se puede ver a lo que realmente suena la banda.

Ma. Bueno, es casi una obligación para cualquier grupo. Yo en particular soy un animal más eléctrico, la verdad, no suelo ser muy fan de hacer acústicos. Pero se hacen y se disfrutan por supuesto.

M. Coincido con los dos. Y sí, disfruto mucho el acústico también, aunque prefiero el eléctrico, da más vértigo.


-¿Cómo esperáis que sea el futuro tras esto del Coronavirus?
M. No lo sé. Prefiero no pensarlo mucho, me agobio. Voy semana a semana. Pero sin duda, será un escenario distinto, eso es lo que trae la enfermedad, la posibilidad de cambio, pero a su precio, claro, el de la barbarie.

m.  Me agobia bastante pensar en el futuro después de esto, trato de no pensar demasiado y aprovechar para hacer cosas en la cuarentena y tener el cerebro ocupado.

Ma. Yo sinceramente prefiero no pensarlo. Con la cuarentena es un poco más difícil mantener la cabeza, así que intento tomar un día de cada vez. Si me pongo a pensar y elucubrar sobre el futuro, es probable que me venga abajo, y no me conviene. Ya está la cuarentena en sí ahora mismo para alterar mis ánimos, prefiero no contribuir a ello pensando en qué será o podrá ser.

-GraciasM. Gracias por escucharnos 🧡

Ma. Si yo me llamo Juan y tú te llamas Andrés, 1+1+1 son tres.

#Fotografía de so promocional.

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